¡¡¡¡QUE PEDAZO DE CONFERENCIA TUVIMOS AYER!!!!
Yo no tengo duda que fue la mejor conferencia que hemos tenido en la sociedad desde su fundación, entretenida, juegos maravillosos, muy bien presentados, y todo reforzado con un simpatía especial que tienes dentro de ti mis mi querido amigo.
Solo puedo decirte, que me resultó corta yo hubiese aguantado 5 horas más,yo estaba en el CIELO de la magia.
La conferencia comenzó con dos juegos de anillo y cuerda, sensacional la presentacíón, juegos con billetes, los cuatro ases clásico pero presentado maravillosamente y lo mejorde todo es que los juegos están estudiado al máximo detalle.
Y para ti mi querido amigo que estás viendo mi blog si te enteras de una conferencia que den cerca de donde tu viv, no dejes de ir a verla porque disfrutarás como en tu vida disfrutaste viendo magia.
Yo he estudiado los 4 ases lo hice en tres versiones, esta me dejo loco en el tercer As, me lleno de alegría ver el forzaje que yo hago con muchísima frecuencia, del abanico de cartas y pasando el dedo.
Todo me resultó maravilloso, la música elegida que fue estupenda, y mi querido amigo 60 años haciendo magia y en una hora he visto la magia que yo buscaba que nunca podré hacer porque sin saber el porque un días me encontré con una magia de humor, pero si te puedo decir que yo buscaba esa magia que ayer me enseñaste, todo esto ayer lo hablé contigo aunque te conocí hace años y no llegamos a recordar donde fue.
Y para colmo me hicisteis disfrutar a los 73 años con el RATON PEREZ como un niño de 6 años pasé una tarde maravillosa mi buen amigo ayer todos los que te escuchamos tu ARTE, fuimos niño durante dos horas.
GRACIAS POR HABERME ECHO VIVIR MI INFANCIA CON LA MAGIA.
Un abrazo para ti y para tu mujer.
Juan Escolano
A mí me pasó lo mismo, Juan. Disfruté como lo que soy, un niño, participando de la genial frase final: "La magia es volver a ser niño y jugar en la playa haciendo castillos de arena. Gracias por jugar en la arena conmigo...". Brutal.
ResponderEliminarMe encantó su amor a la magia, resaltado en esas dos veces a lo largo de las explicaciones en que dijo: "cómo me gusta la magia", al valorar lo buenos que eran un par de procedimientos. Yo no iba en principio a comprarle nada, pero me encantó ese amor a la magia y esa humildad, y le compré todo para poder pillar ese espíritu.
Íbamos en el coche, hacia la conferencia, criticando un poco aquel estilo desgraciadamente famoso de magia de meterse con el público, ridiculizarlo, etc. y no sabíamos que nos íbamos a encontrar con un paradigma del estilo contrario: respetuoso, modesto, sencillo, educadísimo, atento, humilde,.... Te gana.
Las técnicas con billetes, impecables. Quizá yo hubiera preferido elegir no aguantar tanto el empalme porque por lo menos aquí en España somos muy mal pensados y enseguida sospechamos de las manos semicerradas. Pero las técnicas de empalme y "desempalme" y carga, son brutales. Por no hablar del contaje: verdadero, verdadero, falso, verdadero, falso, falso... Y nosotros: "pues yo veo todo igual, yo sólo veo billetes de 10 euros pasando... ", jeje.
La segunda fase del anillo es un milagro, es para montar la rutina en torno a ella sólo por haberla conocido, y anda que no hace lo que haya que hacer para hacerla posible, hasta hacerse una chaquetilla para el tema. Jo, podría haber vendido también chaquetas de ésas... aunque creo que hubieran costado más de 20 euros o así... ¡Menuda chaquetita!
Lo de la rutina de ases es preciosa y además merece un puesto de honor en la conferencia sólo por el detallito del tercer as, con el cual Jörg está encantado como mejora a los ases macdonalds, y realmente es para estar contento porque la última fase es muy clara después de haber visto las otras, y complementa. Lo que no se ve en una se ven las otras, que es la filosofía en la que Jörg tanto insistía. Pero con la musiquilla y eso quedó una cosa muy bonita y muy bien presentada, digna de conferencia, aunque algunos vayan buscando manejos, culebreos y dejadas con la punta de la nariz. Ya lo dijo al empezar: olvidaos de lo que sabéis de cartomagia.
Las simpáticas 10, una maravilla, como siempre, y una delizia ai se eu te pego, verla en manos de su autor. El detalle de la carta vuelta ya lo conocíamos pero no nos cansamos, es la sal del juego.
El tarot otro ejemplo de lo de que "no hay juegos buenos o malos sino bien o mal presentados", que no es una frase totalmente exacta, pero que se vio que con tres velitas y mucho cuento a lo Aramís Fuster, es una cosa que puede pegar mucho a los profanos. Nosotros, al ser magos, no lo notamos, pero debería haber habido un profano, hubiera sido lo que más le gustaría.
Y bueno, yo, como soy niño y profanillo, me quedo -al igual que Juan- con el ratoncito Pérez. El momento en que sale la cabecita vale por todo. Es de esas cosas que luego el niño recuerda toda su vida. Es magia pura, es como ver un hada, un gnomo, etc.
Y encima en español, que tiene tela. A Jörg hay que traerle para una segunda conferencia, que seguro que tiene cosas para llenar un par más como mínimo.
No me extraña nada esas alabanzas que le dedicas, Juan. No eres nada exagerado, dices la verdad.
Pero yo, de toda la conferencia, de toda la magia que pudimos ver, -maravillosa, coincido contigo, Juan-, de todo... me quedo con una cosa por encima de lo demás: me quedo con Jörg. Me quedo con la persona, con las personas: con Jörg y con Karola. Yo quiero ser como ellos de mayor. Es bueno conocer personas así de encantadoras porque te sirven como modelos, porque uno no sabe muy bien cómo ser en esta vida, y copias lo que ves, hasta que topas con un modelo que merece la pena de aspirar a él. Yo quiero ser así: amable, simpático, educado, sencillo, humilde, amante de la magia, natural, un niño que juega en la arena haciendo castillos y que invita a los demás a jugar, y que de vez en cuando se le aparece el Ratoncito Pérez. Y me están entrando unas ganas locas de aprender alemán.
ResponderEliminarGracias, Jörg, por enseñarme a ser mago, por enseñarme a ser artista, por enseñarme a ser persona. Qué maravilla, qué encanto de hombre Jörg y qué encanto de mujer, Karola. Que me los envuelvan que me los llevo, y al ratoncito también.